A tres pasos del edificio del Municipio, la iglesia
de Santa María Assunta. Divisamos su torre desde el mausoleo Padovan. Teníamos
como objetivo ver las pinturas de Battista Volpato que decoran los altares de
San Giacomo y San Sebastiano, en una de las cuales aparece San Rocco. El reloj
incrustado en el muro frontal de la torre marcaba las 16h15. A esa hora de la
tarde la iglesia estaba cerrada. Nos conformamos con admirar su fachada neoclásica,
muy similar a la de Primolano, y aún más austera. Sobre el pórtico, un nicho
con la Virgen y el niño, y encima un frontispicio decorativo y una inscripción
en latín. El frontispicio superior de la fachada, descansa sobre las dos
columnas centrales, y a cada lado, las líneas austeras devienen suaves y
ornamentales con la inclusión de bulbos, ahora ennegrecidos por el tiempo, y un
vano sin vidrio destinado a iluminar la nave. ©VCAweg2012
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