Casier (San Teonisto)

Entramos bordeando la cerca de la Villa Toso y terminamos en la plaza Pio X. Un edificio con evidente estilo art déco me hace frenar, y como es un banco (Banca di Monastier e del Sile), entro para sacar dinero en el distribuidor. Con el fondo dando al Sile, se alza la iglesia parroquial de San Teonisto. Ciento once años duró su construcción, y como no estaba abierta, no pude saber quién fue este Teonisto santificado. El edificio respira ese estilo neoclásico que se debate entre austeridad y elegancia. El frontispicio tiene en su centro un ojo de buey, compuesto por 8 orificios en forma de aspas similares a las cabezas o Lau buru que tienen origen romano. Capiteles con motivos vegetales, y un exceso de molduras ocupan el espacio que corresponde al arquitrabe, el friso y la cornisa. Vuelve la torre campanario con el basamento en forma de raspadura, se alza y termina en una cúpula octogonal discreta. Del lado opuesto a la torre, el pueblo de Casier erigió un monumento a sus caídos entre el 1915 y el 1918. De frente al Sile un viejo edificio, maltratado por el tiempo y la humedad, no pasa por alto a la vista de los pasantes.  Adosada una puerta cochera, y del otro lado, la misma propiedad, mejor conservada. Pero lo más curioso, el buzón de cartas, en hierro forjado y blasonado. El tiempo avanza, y hay que buscar una salida y un puente que nos lleve a la otra orilla del Sile. ©VCAweg2012